El mundo es una bellota luminosa sin esperanza
Y el viento es una yegua desbocada a la media noche.
El mundo vibra y no hay quietud
Y el Terror y la Discordia ni se despeinan.
El mundo es movimiento incesante
Y cada cosa palpita, pero no hay Amor.
Ni después de la muerte habrá quietud,
Solo el viento que barre el polvo y los días.
José León