Sumerge en el río a aquel que ama el agua
William Blake
Por la ventana de mi habitación puedo ver la parte trasera del Kínder. Como estamos en el segundo año de la peste, cada vez se siente más la ausencia de los niños. Falta su gritería que era nuestra certeza de la vida futura. Pero a todo se acostumbra y adapta uno. Ahora he aprendido a poner más atención a la barda de piedra y a todas las yerbas y florecillas que nacen en sus intersticios. De vez en cuando veo pasar a dos gatos, uno negro y otro color miel con manchas blancas. Luna, mi perra, que nació en el primer año de la peste y está acostumbrada a ver poca gente, se entretiene ladrándoles. Sólo una noche de canícula vimos a un tlacuache. Es un animal parecido a una rata gigante pero con la trompa más larga. Alrededor de los ojos tiene, como incrustada, ceniza de la noche y, en las garras, cuarzo lunar. En algunos pueblos, no muy lejos de aquí, aún las personas mayores le atribuyen poderes mágicos al tlacuache y lo asocian con espíritus del bosque. En otros pueblos, un poco más lejos, allá donde le llaman el Mezquital, lo acostumbran comer. Yo un día lo comí, por allá, en la feria de Santiago.
Bueno, todo este preámbulo para decir que voy a proponer a los vecinos que se derrumben las bardas que cercan el Kínder del pueblo, este que ahora veo con su manto oxidado de ausencia. La promesa alegre de los niños tiene que fluir como río después de la lluvia por todo el monte.
Yo no tengo hijos, pero soy profesor. He trabajado en todos los niveles, en escuelas públicas y privadas, de la ciudad y del campo. Es cierto lo que dicen algunos colegas . Un niño cuando entra al Kínder, es creatividad y hambre de luz en estado puro. Al llegar a la universidad, ese mismo niño se ha convertido en un joven al que se le han cercenado tres cuartas partes del alma. La otra cuarta parte la pierde si estudia un posgrado. Mi única esperanza está con los niños que van a la escuela, pero están en esa etapa que llaman, acertadamente, preescolar. Ellos aún aman el agua y fluyen como ríos.