Dicen que el poder a los listos marea y a los tontos los enloquece. También dicen que a los que comúnmente llamamos poderosos, más que tener el poder, el poder los tiene y es ejercido a través de ellos. Así pues, esa voluntad de poderío que acecha por cada rincón del cuerpo social, sin rostro y anónimo, es personificado por Cervantes en todos estos capítulos de los duques. Es la primera vez que lo percibo o que pongo atención al hecho de que de los duques no sabemos sus nombres. Eso hace más descarnada la personificación del poder que representan. Ahora que el buen Sancho es gobernador, está probando la miel amarga y cruel del poder.
Publicado por Colectivo de escritores hidalguenses y de otras tierras
Anarquista patafísico y bloguero en ciernes Ver todas las entradas de Colectivo de escritores hidalguenses y de otras tierras