La poesía y el algoritmo

Se dice que la inteligencia artificial es el próximo paso evolutivo de nuestra especie. A este evento singular de trasmutación del hombre hacia la máquina, le llaman era poshumana. Descreo de esos funestos vaticinios que muchos hoy ingenuamente o (casi es lo mismo) perversamente celebran. La cibernética podrá crear cualquier cosa, menos el alma. Valga, para explicarme, esta fábula. Había un señor en el pueblo, gordo y feo que quería adueñarse del tiempo y cuerpo de todos los ciudadanos. Quería devorárselos, tragárselos completitos. Un día un mercader le ofreció un juego de ajedrez donde el que perdía, perdía la partida y el alma. Como el viejo gordo y feo era el más poderoso y rico y el mejor ajedrecista, no tardó en adueñarse de más de medio pueblo. Al cabo de unos años, ya sólo unos cuantos desarrapados habían conservado su alma haciendo tablas milagrosamente en cada partida, pero nunca pudiendo ganar. La situación era insoportable, el viejo se hacía más gordo y más rico, y el pueblo cada vez estaba más solo y triste y sin esperanza. Entonces estos cuantos desarrapados y desarrapadas volvieron a escuchar antiguos cantos y antiguas canciones y empezaron a cantar con el pueblo y comprendieron mejor el ajedrez. No tardaron en vencer mil y un veces al viejo hasta que recuperaron el alma de los ciudadanos.

La informática ha logrado crear programas de ajedrez que juegan mejor que cualquier humano, incluso con piezas de ventaja. Hemos sido vencidos. Pero sólo parcialmente. Aún no hay programas, a pesar de los incesables intentos, que puedan crear un poema decoroso y de mediana calidad. ¿Podrá lograr la máquina escribir un poema que supere o iguale a alguno de los mejores de Quevedo o Sor Juana. Lo dudo. Si algún día lo logra, en ese momento y no antes, podremos decir que la poesía y, con ella, los humanos, habremos muerto.

Apología del Blog

Necesitamos plantearnos como horizonte el contar con nuestras propias redes sociales digitales. Unas redes que sirvan para organizarnos y nos ayuden a hacer comunidad y no ha fragmentarnos e individualizarnos hasta hacer del yo un soberbio y hueco gigante. Necesitamos que no lucren con la comunicación y el juego como sucede ahora. Como todo lo bueno, el camino será largo y hay que andarlo. En este sentido no coincido con los agoreros de la catástrofe y el desaliento. Sí, el capitalismo digital nos enajena y amenaza cada día más con ser un poder totalitario que no nos deje ninguna opción ni resquicio de libertad. El peligro es real y palpable y el pesimismo justificado. Pero hay que tener esperanza a pesar de la creciente barbarie. Sin ella nos condenamos a vivir eternamente en el infierno de lo igual. Experiencias alternativas existen desde hace mucho. En el Chile de Salvador Allende, por allá de los años setentas, ya se planteaba utilizar la tecnología para fortalecer la planeación económica y la toma de decisiones democráticas. Ese es el ejemplo que ahorita me acuerdo, pero seguramente hay muchos antecedentes y ya no se diga lo que está sucediendo ahora.

Insisto, el camino es largo, difícil, inseguro, pero hay que empezar a hacerlo , como dice el dicho, con calma que llevamos prisa. Y sin tenerle miedo al debate y las discusiones desde diferentes puntos de vista, porque algo que define a ese infierno de lo igual es que quiere el consenso fácil y light, donde todos pensemos lo mismo, cada quien en su isla. ¿Así cómo nos vamos a enriquecer y avanzar? Con eso en mente, invité a amigos y amigas a que escriban sobre los temas que les interesan y apasionan y que puedan contribuir al debate desde su experiencia y preocupaciones personales.

Desde que abrí el blog lo hice con esa intención. Me parece que este es un espacio donde se puede explorar la creatividad y el debate. Hubo un tiempo en que los blog adquirieron un auge muy fuerte. Eso fue en los primeros años de este joven siglo. Ahora ya no tienen esa fuerza, pero precisamente por eso hay que aprovechar que ya no están de moda e ir incentivando el uso de otras redes que no sean las más comunes. En un mediano plazo queremos también tener una radio digital. En fin, que ya empezamos y esperamos contar con su participación.

Así queda la colaboración distribuida por días:

#Dante2021 Purgatorio Canto XV: ¿Qué significa despertar?

Dicen que Dante se adelantó en muchas cosas a Freud y Jung, los principales psicoanalistas del siglo XX. Sobre todo a este segundo más imaginativo y simbolista que el maestro. En el canto XV, el florentino mientras sube la montaña del Purgatorio para acceder al círculo donde están purificándose los iracundos, tiene una extraña ensoñación:

Cuando mi alma volvió a su normalidad saliendo de aquellas visiones que, aunque extrañas, no dejaban de ser verdaderas, reconocí que todo había sucedido en mi imaginación, más no había en ello error o falsedad, y mi guía que me veía como a un hombre que sale del sueño, me dijo: ¿Qué es lo que te pasa? , ¿Por qué no puedes mantener tu conciencia? Has andado media legua con los párpados caídos y vacilando con los pies, como aquellos que han tomado mucho vino

Después Dante le contesta a Virgilio que si supiera lo que le vio estando en la inconciencia, lo entendería. El maestro le contesta que aunque tuviera cien máscaras sobre su rostro no podría ocultar sus pensamientos delante de él. Si le pregunta qué le pasa, es para traerlo a la conciencia «y devolver el vigor a tus pies, pues conviene apresurar a los que acaban de despertar».

Ese despertar se dio después de que Virgilio le explicó el porqué de la envidia: al desear algo que disminuye cuando se comparte con los demás, se anida la melancolía en el corazón. Las visiones de Dante habla de una madre con dulce acento que reclama y busca a su hijo. Después, de un joven al que quieren masacrar mientras el ruega al Supremo Señor por sus perseguidores. El jueves y el viernes santo estuvo lloviendo y con neblina. Hoy amaneció sin una nube en el cielo y entonces el plumaje del día, como el pavo real, que es el orgullo de Dios, bañó de luz al pueblo. Ungaretti, otro poeta Italiano, lo dijo como ninguno, en Mañana, un poema de dos líneas:

Me ilumino

De inmensidad

Y entonces ¿Qué significa despertar? Para eso hay que viajar al inframundo y regresar para contarlo, cosa que pocos hacen. Y seamos sinceros lector o lectora, tú y yo no lo hemos hecho del todo. Tal vez algunas claves para ese despertar están en la Divina Comedia y en otras obras igualmente entrañables. Tal vez están en la figura de Jesucristo, quien multiplicó y después repartió panes y peces para todos y todas. Tal vez están en la vida cotidiana con los seres que amamos, aquí y ahora.

#Dante2021 #Dantedi2021 Purgatorio Canto IX: ¿Cuáles son tus siete P?

Es cierto. No siempre se encuentra uno en el tiempo y el lugar adecuado para leer. De hecho, lo más común es que el ambiente no sea el propicio. En estos momentos recuerdo mis épocas de universitario, cuando devoraba los libros. Entonces estaba tumbado en mi cama o en el sillón y algún conocido me interrumpían sin reparar en el daño que ocasionaban. A veces, algún familiar simplemente me decía:

-Ya deja de estar de huevón y haz algo de provecho.

He aprendido a lidiar con ese malentendido. Y es que es una creencia que se encuentra muy arraigada en nuestra sociedad. Debo decir que incluso he conocido gente con posgrado que la lectura la concibe como una parte de su formación académica, necesaria sí, pero sólo como un paso para después pasar al mundo de a de veras, ósea el mundo de la práctica: hechos no palabras, vociferan una y otra vez. Y es que hay una tendencia antintelectual muy perniciosa a separar estos dos mundos, la teoría y la práctica, como si tal cosa fuera posible. Para mí no hay tal. Y más. Para mí, leer es una de las más intensas e importantes actividades humanas. Sin embargo, hace mucho que me cansé de tratar de explicar por qué. Lo que puedo decir es que estoy seguro sería peor persona de la que soy si no hubiese escuchado el llamado de los libros. Y llegué a ese llamado por medios extraescolares. En la preparatoria reprobé la materia de literatura y, ya en plena universidad, me costaba usar los signos de puntuación más elementales. Ya no se diga la gramática. Es más, como podrá constatar el lector, aún me cuesta escribir correctamente. Y es que siempre fui mal estudiante, pero un día un libro me sacudió en lo más profundo de mi ser y de ahí pal real. Esa pasión no me ha abandonado. Por eso trato de trasmitir el amor a los libros. Con uno o dos que contagie, me doy por bien servido.

Estos días que he estado hojeando, Hacia un marxismo mundano de Armando Bartra, me encontré con la transfiguración de las famosas tesis de Feuerbach. Según Bartra, «Redactada por un hombre de acción, un obrero de manos callosas y botas claveteadas, la Tesis II hubiera quedado más o menos así: Gracias al pensamiento crítico nuestra práctica se hará más verdadera y poderosa», mientras que «en la Tesis XI el obrero cultivado hubiera escrito: » Los trabajadores no hemos hecho más que transformar el mundo por cuenta de otros y contra nosotros; de lo que se trata ahora es de comprenderlo críticamente para así darle sentido humano a esa transformación». Ahora bien, desconozco si soy ese obrero cultivado. Es cierto que desde niño he realizado los más variados oficios y trabajos que me han puesto las manos callosas, pero también es cierto que he pasado otra buena parte de mi vida estudiando o laborando como docente, lo que implica un trabajo intelectual poco familiarizado con el pico y la pala. Y agradezco que haya corrido con esa suerte. Sólo quien no ha sido obrero puede idealizar la explotación y degradación que se padece en el trabajo o cuando se está desempleado. Es decir, ser obrero en tiempos neoliberales.

Todo este rollo para invitar al lector o lectora a que piense cuáles son sus siete P que tiene grabadas en la frente. En el canto IX por fin Dante y Virgilio llegan a la puerta del Purgatorio. Ahí un Ángel custodia la entrada. Después de que el florentino se postra ante sus pies para pedirle humildemente que les abra la puerta, el Ángel:

Blandió su espada y con la punta me hizo en la frente siete figuras en forma de P. » Haz por lavarte esas manchas cuando estés adentro», me dijo.

Estas letras P se refiere a los siete pecados capitales: soberbia, pereza, gula, lujuria, avaricia, envidia, ira. Son letras P que todos y todas llevamos tatuadas en la frente y que muchas veces se manifiestan en nuestras acciones. Por eso, dice el clásico, sin teoría crítica no hay práctica revolucionaria. Y creo que la teoría crítica implica la autocrítica.

Tú, lector o lectora, ¿Reconoces que tienes grabadas esas P en la frente? ¿En que circunstancias se te marcan más unas que otras? ¿Quisieras que esas P se te borraran de una vez por todas o vives a gusto con ellas? ¿Cuál es la letra P que más te desagrada?

#Dante2021 #Dante700 Purgatorio Canto II: Día Mundial de la Poesía

Hoy se celebra el día mundial de la poesía. En el segundo canto del purgatorio, Dante se encuentra a Casella, un amigo y poeta como él. Le pide que recuerde y entone aquel canto que lo alegraba pues el viaje que emprendió por el Infierno le ha causado un gran dolor. Entonces el amigo comienza:

Amor che nella mente mi ragiona

Cominció egli allor sí dolcemente,

Che la dolcezza ancor dentro mi suona.

Lo mio maestro, ed io, e quella gente

Che´eran con lui, parevan sí contenti,

Com´a nessum toccasse altro la mente.

( El amor que razona dentro de mi mente…comenzó a cantar con dulce acento, y continuó con tal sentimiento que ya todavía llevo esos acentos en el corazón; mi maestro y todas las almas que ahí se encontraban daban muestras de encontrarse tan embelesados como yo, y en esos momentos parecía que no teníamos en la mente otra cosa que no fuera el canto.)

Entonces las almas siguen embelesadas con el canto hasta que llega el anciano venerable que les grita se apresuren hacia el monte para purificar sus pecados. Las almas despiertan del encanto y obedecen.

Creo que el pasaje de este canto segundo explica una de las funciones primordiales de la poesía: un alimento que ayuda a soportar el sufrimiento y una búsqueda de la manifestación de lo divino. Sobre todo en tiempos violentos como el nuestro. Aquí dejo un interesante artículo al respecto: https://elvuelodelalechuza.com/2019/05/12/la-poesia-amorosa-en-tiempos-violentos-guinizelli-cavalcanti-y-alighieri/

#Dante2021 #Dante700 Canto XXXIV: Adiós al Infierno

Este es el último canto del Infierno y así, hoy, terminamos la primera parte de las tres partes que componen la Comedia. Hasta ahora no ha surtido el efecto esperado la propuesta de la lectura, pues no logré generar la interacción que esperaba. Sin embargo, lo que importa es el diálogo que establezcamos con uno de los más bellos poemas jamás escritos. Lo han dicho todos los amantes de los libros: a la hora de recorrer los versos, las estrofas, las páginas, el milagro se repite: quien les insufla nueva vida es el lector. También quien lo enriquece con sus dudas, vivencias, experiencias e interpretaciones buenas o malas.

En este canto Dante nos presenta a Belzebú, mejor conocido como el Diablo o Satanás. Monstruo de tres cabezas, en una de ellas devora a Judas Iscariote. No puedo no recordar las Tres versiones sobre Judas de Borges donde a modo de cuento, se establece la sugerente hipótesis de que en realidad Judas y no Jesús es el redentor, humillándose hasta la infamia para salvar a la humanidad. De igual forma, me viene a la mente una celebración de los hhähñu del Valle del Mezquital.

En la comunidad de Yolotepec en el Municipio de Santiago de Anaya, existe una fiesta que se relaciona con las piedras. En la fiesta del barrio La Flor, en el mes de febrero, se festeja al patrono Jesús de Nazaret, uno de los ritos consiste en que los Baré van a las casas pidiendo animales para desollarlos en “cuevas sagradas, donde habita el diablo”.  Así lo explica Don Ponciano:

Son creencias reales, en cualquier parte te las puedes encontrar, son una piedritas que van formadas como soldadito, y si te llegas a cruzar hay unos rituales para curarse, hay que darle de comer, se le va a dejar a donde ellos creen, esos es lo que desde nuestro antepasado creían, como el dios del aire, el dios del viento, el dios del agua, eso es lo que se creía, la luna para saber cuándo sembrar. El español lo vino a quitar con capilla e iglesias pero son cosas reales de esta tierra. Eso existe, a mí me ha tocado darle de comer a esas piedras y mi tía fue la que me tuvo que curar. Como las cuadrillas de niños que se tienen que juntar para ir a darle de comer a las piedras. Los Baré, es un ritual, es una creencia para que con un cuerno de chivo, caminar para hacer nuestra historia, y eso lo transformamos como fiesta, la gente tiene fe en su tierra, nuestras creencias son muy valiosas para mantenernos unidos, para compartir. Los Baré son los soldados, traen su música, unas banderas, luego en esta fiesta es ir casa por casa, te arrodillas, te dan chicotazos, se recolectan animales, para hacer sacrificios, para llevarlo a los mayordomos, y la sangre que se recolecta se deja en una cueva, una ofrenda que se hace al mal, para dar de comer, para tener armonía.

Le digo adiós al Infierno con las siguientes preguntas: ¿Los dioses habitan en nuestras fantasías o son independientes a nuestra psique individual y colectiva, es decir, son parte del ser del mundo? ¿El mundo tiene alma o el alma es una proyección de nuestros deseos que aplicamos al mundo objetivo y muerto?

Vale la pena reflexionar sobre estas añejas preguntas. Vale la pena formularlas de mejor manera. Como quiera, mañana empieza el viaje por el Purgatorio.

#Dante2021 #Dante700 Canto XXXIII: Los que no pueden llorar

Una amiga el otro día me decía que si juntáramos las lágrimas que las personas hemos derramado a lo largo del confinamiento por la pandemia, podríamos formar ríos caudalosos. Si su hipótesis es cierta, algo bueno se anuncia para los tiempos venideros. Llorar es bueno y es necesario. Lo contrario, el no poder llorar, el ahogarse por los nudos en la garganta, les pasa a los que habitan en el último círculo del infierno, los que están en lo más profundo del abismo, junto a satanás. Así lo relata Dante:

De ahí pasamos al recinto donde el hielo oprime con fuertes ligaduras a los penitentes, pero ellos no se encuentran con la frente baja, sino con la boca arriba, con lo que su mismo llanto los ahoga, por lo que no pueden llorar, y entonces el dolor, que no encuentra el consuelo del llanto, se mete a sus adentros para aumentar su angustia…

Y a ti, lector o lectora ¿te ha pasado alguna vez que, aunque quieras, no puedes llorar? ¿tiene razón Dante al suponer que el sufrimiento es mayor cuando no se puede llorar? ¿Lloras sol@ o acompañad@?

#Dante2021 #Dante700 Canto XVIII: Malebolge

El infierno dantesco a grandes rasgos está dividido entre aquellas almas castigadas por la intemperancia y que se asocian a lo irracional, y las almas castigadas cuya maldad que utiliza la razón y la inteligencia. El canto XVIII nos presenta el Malebolge, especie de laberinto donde hay diez pozos, donde habitan los fraudulentos. En este primer pozo nos encontramos con los rufianes, seductores y aduladores.

La postura de Dante, que sigue, dicho sea de paso, la ética aristotélica, me ha planteado una serie de preguntas referentes al problema del mal. Y es que si el tipo de almas malvadas que están condenadas en el Malebolge sufren su castigo por hacer uso de su inteligencia y razón, en otras palabras hicieron un uso malévolo de su libertad. Así, esta postura difiere con la que, siguiendo a Hanna Arendt, había hecho mía sobre la banalidad del mal. Para la filósofa, lo que nos hace malas personas es que nos negamos a pensar o lo que es lo mismo, nos negamos a tener un diálogo inteligente con nuestra alma y nos negamos a cuestionar a la autoridad y el poder.

Aquí dejo la excelente película que hizo Margarete Von Trotta sobre la filósofa alemana y una excelente conferencia sobre la estructura moral de la Divina Comedia de Ángel García Galiano

#Dante2021 Algunos artículos sobre Dante y la usura

El próximo domingo 7 de marzo tendremos nuestra primera charla con el Dr. Edgar Roldán, la cual hemos titulado Dante y la Economía. Hoy que hemos llegado al canto XVII donde en el séptimo círculo se encuentran los usureros (casi hasta el mero fondo del infierno, por algo será). El tema es de amplio y difícil y a lo que aspiramos es que lo podamos comprender de la manera más sencilla posible. Y sobre todo que nos ayude a comprender de qué manera estos temas se relacionan con nuestra vida diaria y sus problemas.

Decía Wallerstein que el colapso del sistema capitalista en las próximas décadas sería caótico, doloroso y difícil para ricos y pobres, chicos y grandes. Y ya vemos la razón que tenía el sociólogo estadounidense. Decía que el sistema que saldría posterior a esa debacle, sería incluso peor de lo que teníamos si no triunfaban las fuerzas y movimientos libertarios que están empujando hacia la construcción de una sociedad más justa e igualitaria. Y ya vemos que nos acercamos a pasos agigantados a ese punto de inflexión. También decía que en momentos históricos como el nuestro, las acciones individuales o de pequeños grupos pueden tener efectos insospechados en el largo plazo, al menos en el ámbito local que es el que a nosotros más nos interesa. Cuando nos haya quedado claro que nunca más regresaremos al mundo que teníamos hasta aquel lejanísimo 2019, el egoísmo y el deseo de sobrevivencia nos hará juntarnos y sacar lo mejor de nosotros mismos. Sí, también en muchos sacará lo peor.

Por el momento, el 25 de marzo, en varias partes del mundo, empezará la lectura colectiva de la Divina Comedia. Este año, a 700 años de su muerte, Dante se acerca un poco más a nosotros. Este año, esa es mi esperanza, la poesía será una fiesta.

Viva ahora, pague después: ecología y usura http://www.henciclopedia.org.uy/autores/Laguiadelmundo/Ecologia.htm

El séptimo círculo: https://elpais.com/diario/2003/11/23/catalunya/1069553248_850215.html

La estructura moral del infierno en la Divina Comedia http://www.ahlm.es/IndicesActas/ActasPdf/Actas5.3/05.pdf

Murmullo VIII

¿Estamos muertos o somos unidad espiritual?

¿El presente transforma el pasado?

No sólo eso sr. Domínguez:

Somos carne de Adán y Eva

La misma carne de estrellas de hace milenios

Si bien este cuerpo colectivo no es nuestro

Y los vanidosos del feisbuk se burlan de nuestra fealdad

Y los envidiosos del feisbuk sólo se nos quedan viendo

Deseando lo que no tienen, dándoselo a quien no le importa.   

Vamos pues, tú y yo, a darnos un beso y que nada nos importe

¿Y si ya estamos muertos?

Vamos y después del chispazo de nuestro beso

Aspiremos el vapor de las cosas

Lo que está lejos que se acerque

Como los naguales,

Están allá, tú los ves lejos, pero están aquí junto contigo

Bolas de fuego brincando entre los cerros.

Vamos con mujeres de hermosas mejillas

Saboreemos su carne de Adán y Eva

Besemos sus cuerpos como si fueran su alma

Que sean nuestro pan de cada día

Que el cuerpo de los hombres, nuestro cuerpo,

Sea el pan de cada día y que nazcan niños

La esperanza en cada inicio

El abrir los ojos por primera vez al mundo  

Rä mui, rä pothe rä te  

“El dicho gobernador los compelía a ejecuciones involuntarias

y les causaba otras vejaciones

por lo que hay que pagarles por su trabajo en tabla y mano propia

y en cuanto al punto de El Despacho

ellos los compelían a trabajar en las Milpas:

Por eso se hace servir a su alteza de declarar que

el pueblo no participó en beneficio alguno,

añadiéndose todo por testimonio y volviendo a correr vista”

Camino a Tezoantla, me senté a descansar

En el mismo encino en cuya sombra descansé ayer.

Su corteza está llena de musgo verde y suave

En su copa se dibujan rojos otoñales

Es un candelabro o una mano:

Cinco gruesos troncos surgen del tronco principal

Como si fueran cinco árboles.

En una parte de su tronco se descifran las letras

                                                                            tAVH

En otras partes están talladas letras ilegibles.

¿Fue en otro tiempo un árbol consagrado a algún dios?

¿Son iniciales que escribió gente enamorada?

Encinos: hambre de luz

Algunos crecen en zigzag para aferrarse a la luz.

Los encinos secos de hojas amarillentas,

Sobresalen moribundos de la aplastante mayoría verde

¿Caerán como un rayo en el desierto?

¿O les ayudarán los otros árboles a descansar?

Voces a la distancia

A lo lejos una multitud arremolinada

El griterío y la algarabía crecen

Pero sus rostros no se distinguen por los encinos:

Brazos serpientes en búsqueda de luz.

Las almas en pena gritan mi nombre por las calles:

¡Juan Nada, regresa ya de tu descenso al infierno!